Cierre de la brecha entre los ingredientes básicos y sintéticos con la extrusión seca de alta fricción
Uno de los objetivos de los programas de alimentación nutricional para animales es equilibrar la necesidad de rendimiento del crecimiento y los aspectos económicos mediante la selección de ingredientes disponibles —cada uno con características nutricionales (algunas de las cuales son importantes y casi imposibles de conocer) y costos específicos.
La parte proteica de una dieta es el componente por unidad de masa más costoso (la energía es lo más costoso en términos absolutos), es por ello que se le dedicó un gran esfuerzo a la determinación de la calidad de las proteínas de los ingredientes, que a menudo se obtiene al medir la digestibilidad de los aminoácidos. De los aminoácidos, la lisina limita la cantidad de proteínas que los tejidos animales pueden construir. Esto significa que, prácticamente, si alguno de los bloques fundamentales de proteínas no está disponible en cantidad suficiente, se reduce el crecimiento del tejido y disminuye el aumento de peso por unidad de tiempo.
Hablé en un blog anterior sobre el uso de lisina sintética como ingrediente para aumentar el depósito de proteínas, lo que suele suceder cuando la formulación normal de una dieta con harina de soya carece de lisina. Y, tal como lo indican los datos de este estudio, el uso de lisina sintética para superar la deficiencia es una mejor manera de aumentar las proteínas corporales completas en los cerdos que aumentar la cantidad de harina de soya básica extraída por solventes (SMB).
Se puede ver una relación lineal directa entre la adición de lisina sintética en una dieta deficiente para cerdos y el aumento del depósito de proteínas corporales. La lisina es, claramente, el factor limitante en esta dieta particular y, como se mencionó antes, esta esto es algo normal. Agregar una mayor cantidad de harina de soya extraída por solventes a la formulación también mejora el depósito de proteínas corporales, pero de una forma menos predecible.
Esta diferencia se debe a varios motivos, como el hecho de que la lisina que viene en la harina de soya debe liberarse mediante la digestión y la absorción, mientras que la lisina sintética solo debe absorberse y llegar a los tejidos para lograr la acumulación proteína.
Sin embargo, para crear proteínas, todos los aminoácidos deben estar presentes —por lo que no puede simplemente incrementar la lisina sintética en una formulación para producir más proteínas. Aquí es donde las proteínas completas, como la harina de soya, entran en juego.
La pregunta pasa a ser: ¿cuál es la manera más aconsejable de mejorar este tipo de situación si hay que decidir entre usar harina de soya extraída por solventes o usar lisina sintética? La respuesta es usar una harina de soya de mejor calidad.
Para ello está la harina de soya extruida en seco/prensada de forma mecánica (ExPress®). La harina de soya ExPress® ofrece mayores digestibilidades de aminoácidos, incluso de la lisina, que la versión de harina de soya extraída por solventes. Por lo tanto, este tipo de harina de soya de mayor calidad lo ayudará a alejarse de la curva irregular de depósito de proteínas que se mostró anteriormente y a acercarse a la curva lineal predecible basada en la lisina sintética.
Converse con nosotros y hablemos acerca de los beneficios del uso de ingredientes de mayor calidad y más digestibles para mejorar el depósito de proteínas.