No se puede mejorar lo que no se mide
A diario ayudamos a muchos clientes a optimizar sus operaciones de extrusión. Puede que estén preocupados por el rendimiento de la harina, una baja productividad u otros problemas. Detalles como el amperaje del motor, la temperatura o el contenido de aceite residual son extremadamente útiles para resolver problemas y hallar soluciones. Este tipo de información es invaluable, pero solo si está disponible. Al igual que con la resolución de problemas, ¿cómo puede mejorar sus operaciones sin antes saber en qué situación se encuentran? Una vez aclarado esto, ¿por dónde puede usted comenzar?
Comience a dar seguimiento
No hay mejor momento que el presente y, si no tiene datos disponibles para lo que intenta mejorar, debe crearlos. Al comienzo siempre se trata de dar mucho seguimiento, no poco. Esto puede aplicarse a cualquier parte del negocio donde busque información e desee identificar ineficiencias. ¿Cuántas toneladas de harina se procesaron? ¿Cuánto es el aceite residual de la harina? ¿Por qué pierdo producción? Sin dar seguimiento ni registrar los datos, es muy difícil determinar las acciones correctas.
Analice los datos
La manera más fácil de resumir los datos es mediante hojas de cálculo. La información se puede clasificar, filtrar y graficar para facilitar la comunicación y la consulta. Se pueden establecer tendencias con el transcurso del tiempo y relacionarlas con los datos correspondientes. Quizá note que el aceite residual de la harina aumenta durante determinadas épocas del año, lo que se corresponde con una variedad particular que se compra en esa época. Otro ejemplo pueden ser los mayores niveles de ureasa en la harina, lo que indica una temperatura de extrusión inadecuada y un posible desgaste de las piezas. En lugar de ver aparecer el mismo problema una y otra vez, use los datos para tomar decisiones.
Elabore un plan
Los datos que recolecta serán útiles si usted hace que sean útiles. Para usar de manera efectiva los datos, se deben hacer análisis para la toma de decisiones. Los datos sirven para justificar las decisiones. Supongamos que se ha determinado que la productividad es baja cuando el inventario de repuestos es bajo. Si analiza esto en mayor profundidad, verá que la menor productividad se debe al tiempo de espera de los repuestos. Esto nos lleva al debate de cuánto inventario de repuestos debe tener disponible para evitar el tiempo de inactividad, lo que puede ayudar a incrementar la productividad y así justificar los costos necesarios para comprar más inventario.
Automatización
Tener datos y usarlos de manera efectiva es clave al intentar implementar mejoras. Basarse en el instinto y la intuición puede funcionar, pero no es algo en lo que pueda confiar al 100 %. Hay software disponible para determinadas aplicaciones que puede ayudar a automatizar este proceso, como nuestro sistema PIP. Este registra de manera automática los datos del rendimiento de la extrusión y también puede almacenar información nutricional en nuestro PIA, para facilitar mucho más la revisión de datos y tendencias. Es posible que haya otros programas disponibles dependiendo del equipo y el sistema que desee analizar.
Use los datos para tomar decisiones racionales y justificadas. Registre los datos, analícelos de manera adecuada y luego implemente un plan. Use esto como fundamento para mejorar sus operaciones.